ABRAÇADA A LA PINEDA

Introducción:

La propuesta está situada en un pinar con una calidad paisajística de gran interés para el habitar de esta futura unidad básica de salud (UBS). El proyecto persigue tres premisas fundacionales, siendo estas las que regirán el discurso completo de la intervención; integración del pinar en el espacio interior, conservación de la identidad frondosa vegetal del perímetro y modularidad constructiva y estructural. La primera se trata de una línea proyectual muy amplia que consiste en la creación de un patio central que abrace el pinar y proporcione, junto con las aberturas estratégicas del volumen, una conexión visual directa entre el usuario en el espacio interior y pinar. 

Desarrollo:

El proyecto está diseñado para generar una planta baja más porosa en la que aparecen diversos huecos en fachada enmarcando el paisaje de pinos y proporcionar una adecuada calidad ambiental mediante el espacio central exterior, el patio que captura parte del pinar. Teniendo en cuenta, en todo caso, la normativa de supresión de barreras arquitectónicas para que los pacientes y usuarios no estén dispersos por el centro y el espacio exterior sin control. 

Por consiguiente, estos marcos hacia el pinar estarán cerrados con paramentos de vidrio que evitarán la salida espontánea de los pacientes pero sí generará visuales entre ambos entornos (paisajístico exterior y sanitario interior). La planta primera conforma un volumen más denso que vuela ligeramente sobre la planta baja en las orientaciones sur y suroeste para generar sombra en los paramentos de fachada de planta baja. Este volumen de planta primera está formado por el paquete funcional de consultas, cubiertas técnicas y espacios flexibles con posibilidad de conversión en consultas. Esta porosidad proyectual está vinculado directamente a la modulación estructural-constructivo planteada en el diseño, de modo que los huecos de fachada y patio central están modulados de forma que el conjunto total de la edificación pueda construirse con materiales prefabricados y modulados.

En cuanto a la segunda de las premisas fundacionales de este proyecto, la conservación de la identidad vegetal está implementada mediante la modesta altura de la edificación aquí propuesta. Desarrollar el cómputo total del programa en planta baja y primera (además de semisótano) sobre rasante desde la cota más alta del pinar permite que el edificio se sumerja en la cobertura vegetal del pinar. De este modo, además de beneficiarse de la sombra proyectada de los pinos sobre la cubierta desde la orientación sur y suroeste, la propuesta no altera la apariencia identitaria de este enclave ya que el elemento más alto de todo el perímetro seguirá siendo, en todo caso, la nube vegetal creada por el pinar. Por otro lado, la materialización de la planta baja provoca una sensación de espejo del propio pinar que disminuye el impacto generado al construir un edificio de esta escala en dicho entorno. 

Finalmente, la modulación ha sido fundamental en el diseño de esta unidad básica de salud. En término estructurales, el proyecto se soluciona mediante una estructura de hormigón (vigas y pilares) prefabricada de siete pórticos arriostrados transversalmente por placas alveolares de 1,20 m de ancho y 5 m de largo que actúan de forjado.